La inversión en cartelería digital para menu boards es alta si comparamos con un menú tradicional impreso. Pero la realidad es que se amortiza a mediano plazo. La razón que todos ya conocemos es que, no son necesarias reimpresiones cada vez que se actualiza el menú o cuando varían los precios. Pero existen otras variables que mejoran el retorno de inversión que quizás no todos tengamos en cuenta.
Mayor retorno de inversión
No solamente se recupera la inversión porque el costo se amortiza en comparación a opciones de cartas en papel o banners impresos, sino que la cartelería digital permite también incrementar las ventas. ¿Por qué?
A) Tiene como característica una mayor atracción visual y persuasión que un menú fijo, como todo material audiovisual, en el que podemos mostrar el vapor de un café caliente en una tarde de invierno, o el queso derretido de una hamburguesa a las 13 pm.
B) Como si fuera poco, tenemos más flexibilidad para poder realizar promociones instantáneas, cambios en tiempo real de acuerdo a:
- Cambios de condiciones del mercado.
- Stock de productos (tanto para liquidar fácilmente, como para actualizar según los que están en falta).
- Clima.
C) Hacer A/B testing probando primero con pequeñas muestras o, segmentar promociones en diferentes sucursales o grupos de sucursales. De esta manera mejoramos la efectividad de cualquier mecánica promocional.
D) Tenemos menos errores de precios o problemas por artículos fuera de stock o con precios desactualizados.
3 ideas para implementar en menu boards
- Incorporar interacción con el público
Salir del modelo en papel también implica repensar las dinámicas que ahora nos permite esta tecnología. La interacción es un gran recurso a la hora de personalizar el menú de acuerdo al cliente y sus preferencias, ofrecer productos complementarios, o descuentos de acuerdo a un programa de fidelización. Asimismo, nos brinda la oportunidad de recibir feedback y recolectar información de nuestros clientes.
- Integrar el menu board en el customer journey map
No olvidemos que la estrategia debe ser omnicanal y, por tanto, homogénea con los estándares de la empresa, con la línea comunicacional y con el camino que recorre el cliente. Pensemos al menu board como un paso dentro de un largo camino: ¿Cómo influye en el siguiente paso? ¿Cuál es el paso anterior? ¿A dónde queremos llevar a nuestro cliente? ¿Qué acción queremos lograr? ¿Qué más podemos aprovechar de esta instancia?
- Medir resultados e identificar patrones
Un menu board es una instancia que nos permite medir. No solamente ventas e interacciones, sino también preferencias y patrones de comportamiento. Pero la ventaja más importante es que el menu board se puede modificar de manera instantánea y automatizada de acuerdo a estos datos. Podemos modificar automáticamente una promoción de acuerdo a su funcionamiento durante el día o a la reacción del cliente en el momento. Definir diferentes caminos de automatización o pruebas A/B testing nos permitirá mayor rapidez en la respuesta y eficiencia en los resultados.
Hoy los negocios en gastronomía pueden aggiornarse fácilmente. Las posibilidades que ofrecen los menu boards son prácticamente ilimitadas y dependen de nuestra capacidad para integrarlos en el negocio. Las ventajas nos esperan a la vuelta de la esquina.